Arakadia organiza un café tertulia sobre carnavales el próximo 14 de febrero en el centro Plazara!
Las sociedades que estaban excesivamente controladas a base de normas y constantemente expuestas a la más extrema de las pobrezas encontraron en el carnaval una ruptura a todos los niveles y estructuras sociales significativas como, forma de vestir, alimentación, interacción social, costumbres, etc.
Hoy, el carnaval no solo es una crítica social si no también una ruptura de lo cotidiano. Esta transgresión a través de las mascaradas, las representaciones simbólicas y las reales producen un efecto de válvula de escape que se caracteriza en algunos casos por el desenfreno y el caos rompiendo así los tabúes que nos marcan como sociedad.
Es tiempo de cambios, de vuelta a los orígenes pero también es el tiempo de la regeneración social y de lo cotidiano.
La mercantilización, presente en todos los aspectos de nuestra vida actual, produce un consumo más elevado de esta cultura carnavalesca lo que genera cambios en las características de estas festividades.
Se abre el debate sobre hasta qué punto las instituciones deben intervenir en las fiestas, del que todas las personas son partícipes sin importar su clase social, y por lo tanto constituyen un patrimonio inmaterial declarado como bien de interés cultural.