FILMMAKING FOR SOCIAL CHANGE

NUEVA EDICIÓN DEL FESTIVAL DE CINE

El Festival de Cine para el Cambio Social celebrará su quinta edición entre el 13 y 17 de junio en el Civivox Condestable de Pamplona. Se trata de un proyecto de Mikel Belascoáin en colaboración con el antropólogo y director del Festival de Cine Documental de Londres, Patrick Hazard. Este año el festival trata sobre “Tribus y Rituales” y el programa proyectará 24 películas y exhibirá seis proyectos artísticos en torno a esta temática.

El Festival se estrena el 13 de junio a las 19:00 horas, con la película «Yaponi, el nido de la Lengua» dirigida por la antropóloga y realizadora Beatriz Bermúdez Rothe. Un trabajo de investigación de más de 20 años acerca del pueblo indígena wanai / mapoyo, de la amazonía venezolana.

Además se expondrán los trabajos realizados por alumnos y alumnas de la Escuela de Cine de Pamplona en Egipto “Cairo in Motion” y se presentarán los trabajos de los artistas navarros Anna Holmes y Iosu Zapata.

Arakadia participará en el festival en la jornada “WAPIKONI MOBILE, UNA EXPERIENCIA INDÍGENA DE CREACIÓN CINEMATOGRÁFICA” que se celebrará el miércoles 14 de junio con la participación de Beatriz Bermúdez Rothe, antropóloga y realizadora venezolana que trabaja con las organizaciones indígenas desde 1978. En esta oportunidad participará una de las responsables de Wapikoni, en una mesa redonda moderada por Txuri Ollo de Arakadia, la cual tendrá lugar al finalizar la proyección de los videos.

Toda la información sobre el resto del festival está disponible en la  página web de FILMMAKING FOR SOCIAL CHANGE . Todas las sesiones darán comienzo a las 19.00 horas y serán de acceso gratuito En este VIDEO se ofrece un resumen de la programación.

REFLEXIONES SOBRE LA EUTANASIA DESDE LA ANTROPOLOGÍA

El pasado 23 de mayo, Arakadia retó al público del café tertulia a enfrentarse a un monstruo entre los monstruos más temibles y temidos, la muerte. La eutanasia como forma de planificar tu propio proceso mortal, no deja de provocar grandes interrogantes. Contamos con la presencia del presidente de la Asociación “Derecho a Morir Dignamente” de Navarra, Manuel Eciolaza. Aunque la eutanasia fue la gran protagonista de la jornada, la antropología se abrió camino para explicar los cambios los cambios en las actividades en torno a los procesos de enfermedad y de morir.

Para las personas que acudimos, la eutanasia reconocida y legitimada dentro del marco legal del Estado español, nos parece un gran avance social. Como organismos vivos, como individuos humanos, no sólo tenemos la responsabilidad de labrarnos y desarrollar un proyecto vital (actividades, ontologías que den sentido a nuestro propio ser, reproducción….). Es nuestra responsabilidad, garantizarnos un proyecto lo menos impactante y doloroso no sólo para nosotras, como seres humanos, sino para facilitar ese proceso de enfermedad a aquellos seres queridos que nos rodean.

Se reconocieron ciertas dudas en su aplicación debidas a lo inclusiva que es la LORE. Se sintió una especie de inconsistencia respecto a las personas que puedan requerir de este servicio desde la salud mental. Sobre la salud física hay parámetros para valorarla, pero parece complicado hacerlo de la misma manera sobre el sufrimiento mental. Se plantean situaciones de personas mayores “cansadas de vivir” y con ganas de morir. Se habla sobre las leyes suizas y el suicidio asistido, que no es lo mismo que la eutanasia.

El testamento vital es un avance al dejar por escrito qué medidas sanitarias se nos pueden aplicar en diferentes contextos de enfermedad, en la que el firmante, como paciente, no esté consciente o con las capacidades mentales estables como para decidir por sí mismo. Pero nos genera la duda de si pueden estar registradas todas las posibles medicalizaciones posibles en un ilimitado contexto de enfermedad. Por otro lado, el paciente escribe en el testamento vital qué desea y qué no, tratando de ponerse en vida, en todas las posibles situaciones dificultosas que puedan acarrear un sinfín de enfermedades. Es decir, la eutanasia recoge medidas preventivas para evitar prácticas posibles como encarnizamiento terapéutico o que la familia decida qué medios farmacológicos y tecnológicos sean aplicados para asegurar la vida del paciente, aun este negándose en caso de haber estado consciente.

En los dos grupos de debate que participaron en la tertulia, se expuso aquello que cada persona pensaba y/o creía sobre la eutanasia y sus experiencias personales a la hora de firmar el llamado testamento vital. Vemos que es un paso sencillo, pero falta bastante información para hacerlo.

Se debatió la importancia de las creencias y de la cultura que tiene cada persona a la hora de abordar el proceso de la muerte. Son muchas las maneras de enfocar ese proceso y todas deben de ser respetadas. Se cuentan casos que cada uno conoce y cómo han sido tratados.

Es importante hablar con normalidad de la muerte, de su proceso, del duelo, etc. Vemos como en nuestra sociedad se oculta la muerte cuando es de vital importancia para poder aceptarla con naturalidad en un proceso que tarde o temprano se va a presentar.

Tratamos la relación médica-paciente. La eutanasia es una voluntad preventiva. En este sentido, la relación médico–paciente se transforma, es menos jerarquizada y más horizontal, en tanto que, el conocimiento sobre salud, medicalizaciones y enfermedades está más extendido y normalizados entre la sociedad. Por lo que un individuo que medita y reflexiona, tratando de planificar algo inevitable, como es la muerte, al igual que planifica la repartición de los bienes inmuebles y su herencia, está lo suficientemente capacitado para establecer un diálogo que sea continuado, de forma dialogante entre médico y paciente, y no unilateral en las decisiones que repercuten sobre el paciente. En este sentido, se promueve o se considera en cómo el código deontológico, el hipocrático, y la propia disciplina médica y aquellas que tienen que ver con el cuidado de la salud en la enfermedad, requerirían de una revisión, en tanto que, al igual que la propia Constitución española, lo más importante del Estado, al igual que el médico, es tratar de preservar la vida de todo individuo/ ciudadano.

MENSAJES DE LESBOS

Refugiados, fronteras, Lesbos ¿Qué imagen aparece al oír estas palabras? ¿Qué discurso resuena en nuestras cabezas? Las pocas veces que esta realidad llega a nuestras manos, normalmente lo hace en forma de historia desgarradora, envuelta en imágenes que poco espacio dejan a la esperanza. Pero ¿Quién es el sujeto de esas historias? ¿Quiénes son los que aparecen en las fotografías?

Miryam Ayerra Ancín, trabajadora del Centro Comunitario Paréa Lesvos, nos propone un cambio de narrativa, una perspectiva que vea más allá de la condición de víctima y ponga en el centro lo que define y dignifica a una persona.

La charla será el martes 6 de junio a las 19:00 h. en la Casa de la Juventud de Pamplona (Calle Sangüesa, 30).